¿Por qué procrastinamos?

Postergar tus proyectos incrementa la ansiedad

¡A todas nos pasa o nos ha pasado! Tenemos una tarea pendiente y la postergamos hasta el último momento, cuando ya es inminente cumplirla. Esto se llama Procrastinar y no tiene nada que ver con la pereza, sino con una baja autoimagen y el miedo a la opinión que otros tengan de ti y lo que hagas.

La buena noticia es que hay muchas formas para salir de esta trampa de procrastinar, entendiendo que siempre hay más de un punto de vista para todo, más de una forma de percibir la realidad y más de una solución a las adversidades. Todo depende de ti.

Un breve repaso por las posibles causas de la postergación de tus proyectos, te puede ayudar a encontrar soluciones. Presta atención y prepárate para cambiar tu chip mental.

  1. Temo que las cosas salgan mal. Solución: Reconoce que la única manera de tener éxito es comenzando e intentando hacer las cosas lo mejor que puedes. Y si te equivocas, recuerda que no es el fin del mundo sino una oportunidad para mejorar.
  2. Me da miedo el rechazo. Solución: Darle largas a tus planes puede llevarte a perder grandes oportunidades y arrepentirte de no haber tomado la decisión a tiempo. Solución: Vive para ti, hazlo que te gusta. ¡Todo estará bien!
  3. Mi voz interna me juzga. ¿Y si en lugar de prestarle tanta atención a tu crítico interno, le das oportunidad a tu mentor interior de hablarte y orientarte? Solución: Apaga al amargado juez y conviértete en tu propia fuerza motivadora.

Postergar tus proyectos incrementa la ansiedad a corto y largo plazo, esto es un hecho. Aunque al principio parezca difícil hacerlo, elige siempre hacer lo que es mejor para ti. No lo pienses tanto simplemente hazlo.

Por: Daniela Chirinos Arrieta