El lupus afecta más a las mujeres

Asegura la Fundación del Lupus de Estados Unidos

De acuerdo a la Fundación del Lupus de Estados Unidos, alrededor de 1,5 millones de personas en este país padecen de esta enfermedad autoinmune. De ese grupo de afectados, el 90% son mujeres, frecuentemente en estado fértil, por lo que se presume que este padecimiento se debe a la carga hormonal.

En los pacientes con lupus, su propio sistema inmunológico ataca células y tejidos sanos por error. Por supuesto, esto puede dañar muchas partes del cuerpo como: La piel, articulaciones, riñones, corazón, pulmones, vasos sanguíneos, cerebro, entre otros.

Vale aclarar que esta enfermedad afecta a cada paciente de forma distinta y los síntomas pueden variar de leves a severos. Sin embargo, en su manifestación más agresiva es potencialmente mortal.

De acuerdo al Dr. Andy Abril, reumatólogo y médico por la Universidad Pontificia Bolivariana en Colombia, con posdoctorado en reumatología, el riesgo de desarrollar esta enfermedad es mayormente genético.

Específicamente, el especialista explica que si en la familia hay individuos que tengan diagnóstico de lupus o de otras enfermedades autoinmunes (como artritis reumatoidea, por ejemplo), los familiares tendrán una probabilidad mayor de desarrollar lupus.

Tampoco se descarta la posibilidad de que existan algún tipo de detonante ambiental que incida en la aparición de esta patología en los pacientes genéticamente susceptibles. Esto hace que las infecciones en el resto de la población no generen mayores complicaciones, pero en otros casos puede precipitar un cuadro clínico de lupus.

Síntomas de lupus

En cuanto a los síntomas, el lupus generalmente puede manifestarse generando unos brotes cutáneos fotosensibles. También puede dar dolores articulares, con inflamación en las áreas afectadas, en especial en articulaciones pequeñas como nudillos, muñecas.

Otra manera de manifestarse el lupus es a través de la pleuritis, la inflamación de la membrana que recubre los pulmones, causando dolor lancinante similar al de una puñalada, en especial cuando se hace una inhalación profunda o al toser.

Cuando el lupus es más severo, comienza a afectar los riñones, comprometiendo las funciones renales, con todas las complicaciones que esta afección pueda desencadenar en el organismo.

Hasta ahora, el lupus no tiene cura. Su tratamiento se basa en medicamentos inmunosupresores para disminuir la actividad del sistema inmunológico alterado, excitado, contrarrestar el avance del daño a los tejidos sanos. Por supuesto, estos tratamientos bajan las defensas y el paciente queda expuesto a otro tipo de virus o infecciones.

Por: Daniela Chirinos Arrieta