Cada historia un mundo

Madres maravillosas de la “Familia Congreso”

Philadelphia, PA.- Estoy convencida que realmente cada historia de vida merece un libro, un Best Seller, una película. Cada vida es digna de contarse, y de la cual cualquiera podría aprender grandes lecciones. Cada vida tiene un propósito, y todas contienen momentos de grandes alegrías y logros, así como de grandes momentos de dolor y pérdidas.

La Familia Congreso me dio la oportunidad de entrevistar a 4 poderosas mujeres, para a través de ellas honrar a todas las madres que forman parte de esta gran familia, que es más que un slogan. Si algo pude percibir en este encuentro con algunas empleadas de Congreso que se desempeñan en distintas posiciones del organigrama, es que independientemente de su rango, de su departamento, o si tienen mucho o poco tiempo trabajando para una de la mayores agencias latinas de la nación; todas se consideran realmente parte de una familia, en la que a cada una de ellas se les ha demostrado con hechos que cuentan con el cariño, comprensión y solidaridad de la que es su segunda casa.

By: Perla Lara – Fotos: Melquiades Rodriguez

Estas son más que cuatro historias de vida, en ellas se reflejan diversas realidades de nuestra comunidad latina en esta ciudad.

Lohanny Ramos: De cliente a empleada

Tenía 16 años cuando viviendo con sus abuelos en Florida, quedó embarazada; la primera reacción de su abuela, fue decirle que tendría que dejar los estudios y concentrarse en la crianza de su creatura. Pero Lohanny no quería eso para ella ni para su hijo, así que decidió inmigrar a Filadelfia, y empezar una nueva vida con la ayuda de los padres del papá de su bebé.

Alguien le habló de uno de los programas de Congreso, que ayudan a las madres adolescentes a tener un trabajo y a continuar con sus estudios. Lohanny recuerda que ganaba unos 6 dólares la hora, formando parte de talleres para otras jovencitas, justamente para prevenir embarazos en la adolescencia.

Su ahora esposo y ella, se las ingeniaron para que ambos continuaran sus estudios; recuerda que entre ellos se pasaban a su bebe entre clase y clase, y que buscaron también ayuda a bajo costo para que cuidaran a su hijo. No fue fácil pero gracias a la ayuda de una gran red de apoyo, ambos lograron graduarse y ahora tienen un hijo maravilloso de 11 años, al cual le están pudiendo pagar la colegiatura de una escuela privada.

Desde entonces durante años aprovechó la ayuda como cliente de Congreso para hacer sus declaraciones de impuestos, y cuando se enteró de que había la posibilidad de trabajar para ellos, habiendo estudiado administración pública, no lo dudo y aplicó. Actualmente es parte del equipo que se encarga de la evaluación de los datos de la agencia, ofreciendo asistencia a los trabajadores y también en el análisis y desarrollo de los 50 programas con los que sirven a la comunidad, predominantemente latina y en su mayoría puertorriqueña.

Ella está muy agradecida por lo que ha logrado hasta ahora, y siente que realmente la ayuda práctica que le ofreció Congreso cuando más lo necesito, es algo que le cambió la vida y que realmente impactó en su destino.

Lohanny continúa sus estudios actualmente en una especialización en Villanova, y aunque no es sencillo tener un trabajo de tiempo completo, ser estudiante, ama de casa y madre; aún atesora la ilusión de volver a dar a luz otro fruto del amor, y ahora también la responsabilidad y del esfuerzo.

Miriam Figueroa: Preparándose para lo que venga

No tuvo en lo absoluto una vida sencilla, su madre la creció sin la ayuda de su padre y tuvo otros 5 hermanos. A la edad de 19 años se convirtió en madre y actualmente, vive con el padre se su hija de 5 años y su hijastra de 13 años.

Es un reto ser tan joven y tener en la casa a una adolescente, pero ella trata de recordar cuales eran sus pensamientos y sentimientos a esa edad, para tratar de ayudar a su compañero en la crianza de su hija; así mismo para Miriam es una oportunidad de entrenarse en esta difícil edad, para estar mejor preparada para cuando llegue el momento de la adolescencia de su propia hija.

Miriam trabaja dando soporte a los estudiantes del Harcum College de Congreso, es un trabajo que le satisface enormemente, pues además de ayudar a los jóvenes y no tan jóvenes a navegar y facilitarles el camino para obtener la ayuda requerida para lograr sus objetivos académicos, ella es capaz de seguir estudiando y atendiendo a su familia. Como el tiempo entre semana es limitado, los fines de la aprovecha para dedicar a su familia tiempo de calidad; pues es su prioridad.

No siempre ha tenido el apoyo de su compañero pues como su propio padre de Miriam, también él ha tenido que pagar cuentas con la Ley, es por ello que aunque sabe de la importancia de tener una figura paterna, y lo que duele su ausencia, también sabe que cuando una madre como la que ella tuvo, se esfuerza por suplir la mayor cantidad de necesidades de los hijos, es posible crecer y desarrollarse plenamente. De ahí la importancia para ella, de seguir estudiando, para que en dado caso tenga la oportunidad de crecer a su hija sola, y no verse obligada como su madre, a tener hasta tres trabajos para sacarla adelante.

Sybille Damas: Sobrevivir y sonreír

La historia de Sybille tiene otra peculiaridad, ella no es latina como las otras entrevistadas, todas ellas de origen puertorriqueño. Ella también es hija de inmigrantes pero sus padres vinieron de Haití; actualmente están jubilados en Florida, pero no dudaron en venir a estar con ella cuando más los necesito. Sybille tiene una exitosa carrera ascendente. Durante unos 5 años trabajó en APM y desde el 2003 paso a ser parte de la Familia de Congreso. Actualmente es la jefa del departamento de operaciones y su trabajo impacta en muchas áreas, en especial se siente comprometida con el área de recursos humanos, tratando de ofrecer lo mejor para los empleados tanto a nivel material como humano.

Con gran candidez y calidez Sybille a través de los años le ha dado a Congreso lo mejor de sí, inclusive en esos momentos difíciles que sin lugar a dudas la pusieron a prueba, como a cualquiera que tiene que atravesar por la difícil batalla de enfrentar un cáncer. Aún estaba en los 30s cuando por pura casualidad tocándose el pecho detectó algo diferente en su cuerpo, algo que le recordó la sensación que sintió cuando tiempo antes había tocado los tumores de una querida amiga que estaba atravesando por ese proceso, y que en su caso resultó en su fallecimiento.

Su amiga Marija T, no sobrevivió, pero fue de gran inspiración para ella, quien enfrentó la enfermedad convencida que una mastectomía radical no la determinaría. Sybille regresaba a trabajar al día siguiente de la quimioterapia, su compromiso con su labor en Congreso, la ayudó a seguir por el camino del optimismo, pero además del apoyo incondicional que le ofrecían sus compañeros de trabajo, también fue importante en cómo enfrentó ese momento de su vida, donde además tenía dos pequeñitas, el apoyo que recibió de sus padres, hermano y cuñada, quienes se trasladaron el tiempo necesario a Pensilvania para ayudarla en lo que requeria.

Sybille está también muy agradecida con su esposo quien también fue determinante para enfrentar este doloroso trayecto. Actualmente está libre de cáncer, y sigue procurando una vida sana, poniendo también ejemplo a sus hijas de cómo enfrentar las vicisitudes de la vida, la cuales no siempre podemos prevenir, pero si estar fuertes para estar preparados para encararlas.

Adriane Perez: De escuchar tragedias a  vivirlas

Todavía no llega a los 40 y ya tiene un hijo de 22 años, del cual está muy orgullosa y basta mencionarlo para que se le ilumine su rostro. Adriane también fue madre a los 16 años. Soñaba con estudiar enfermería pero fue demasiado complicado por lo que tuvo que abandonar esos estudios y dedicarse a estudiar psicología en la Universidad de Temple, una carrera que no era tan demandante y que le permitiría más adelante entrar a trabajar a Congreso, en donde su mamá también trabajaba.

Ella ha pasado por varias áreas y programas pero actualmente es consultora para el empoderamiento de familias (FES Case Manager) en donde continuamente tiene que escuchar historias muy difíciles y en ciertas ocasiones se siente impotente, pues hay casos en donde no pueden dar la ayuda que los clientes buscan, y que por lo regular son por emergencias económicas, sin embargo con los recursos que tiene ha ayudado a salir adelante, a cuanta persona le sea posible. Por más de una década y media, Adriane ha escuchado terribles desdichas familiares, donde la pobreza, las adicciones y otros flagelos sociales, son el elemento común para que muchas de las familias se hayan quebrantado. Ella a través de los años, ha intervenido para empoderar a las familias a las que sirve en Congreso. Sin embargo ella no ha estado exenta de vivir en carne propia, una de las tragedias más temidas en las calles del norte de Filadelfia. Hace dos años perdió a su hermano y a principios de este 2017 a su compañero y padre de su único hijo.

Difícil contener las lágrimas ante un luto tan reciente, sin embargo, con asombrosa dignidad, esta mujer de lucha, piensa en regresar a las aulas, y esta vez realizar su proyecto truncado de estudiar en la facultad de medicina. Lo suyo cree que esta en la enfermería, y tiene planeado conseguir esa meta.

Su hijo quien tiene ya un buen trabajo con un competitivo salario, aún vive con ella, y para ambos es difícil enfrentar esta nueva realidad de no tener a su ser amado con ellos. También es grande la importancia de no tener aun el responsable tras las rejas. En dos años Adriane ha tenido que enfrentar las consecuencias de vivir en una ciudad, donde la violencia y las armas de fuego, quitan cotidianamente la vida de gente inocente cuyo único “error”, fue haberse encontrado en el momento equivocado en el lugar equivocado. Aunque nada le devolverá a sus seres queridos a la vida, si agradece infinitamente el cariño recibido por sus colegas y en general por el personal de Congreso, quienes la han hecho sentir profundamente que no está sola y que cuenta con ellos.

Honor a quien honor merece

Todas estas madres, son portadoras historias extraordinarias; no fáciles y en ciertas ocasiones muy desesperanzadoras, sin embargo tienen en común, que todas ellas son guerreras inconformes, que decidieron enfrentar la vida con determinación; haciendo suyo aquel dicho que indica, “Lo que no te tumba de hace más fuerte”.
Pero también tuvieron al lado alguien que les ha tendido la mano y una red de contención que ha hecho una diferencia en sus vidas y por eso se sienten agradecidas de formar parte de la agencia para la que trabajan, que ha sido esa red de apoyo; así mismo a todas ellas les rinde un tributo su casa, su familia de Congreso, que las felicita en este día de las madres, y que extiende este reconocimiento y felicitación a todas las madres de esta gran familia. Enhorabuena!